Possum: Cuando los demonios del pasado no se van
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Bienvenidxs a una nueva nota de Revista Sincericidio. Possum, del debutante Matthew Holness, es una de esas películas de terror psicológico que divide aguas. Seguramente, a muchos dejará más que contentos y quedarán maravillados, como fue mi caso, y a otros los dejará algo desilusionados. Es que Possum no es el cine de horror convencional al que muchos están acostumbrados, aquí no vamos a ver una trama ordenada y estructurada según la narrativa clásica, todo lo contrario. Possum es un film que hay que ir reconstruyendo a medida que vamos viendo.
Por César Arturo Humberto Heil
Todo empieza con Philip, interpretado por el brillante actor británico Sean Harris, regresando a su casa natal luego de varios años de haber dejado aquel lugar. Carga consigo un viejo bolso en el que lleva a Possum, una extraña marioneta, cuya forma es una combinación de arácnido con un humano. En la casa vive su tío Maurice, una detestable y sucia persona con la que Philip casi no tiene trato.

Durante su estadía allí, Philip buscará la manera de deshacerse de Possum, pero le será imposible. Una y otra vez la criatura de largas patas no lo dejará en paz y lo acosará durante las noches. Philip vive en una extraña realidad, atormentado, en donde las visiones de Possum son constantes y aterradoras. ¿Pero qué es Possum? ¿Un demonio? ¿Un cuento para asustar niños que el mismo Philip ha escrito y dibujado?

Possum es todo eso y mucho más, porque cuando nos enteramos de que un niño, con el que Philip mantuvo una breve conversación ha desaparecido en el pueblo, la maligna imagen de la arácnida marioneta parece empezar a tener otro sentido más siniestro. Pero, como les dije, el film no es nada convencional y hacia el final, el giro de guion, dejará a muchos más que sorprendidos.

Con un comienzo algo desordenado e inentendible, pero que poco a poco se va ordenando hasta hacer completamente entendible a la historia, el director Holness construye un relato perturbador en donde la potencia de sus imágenes aterradoras, la escasez de diálogos y la actuación de Harris, hacen que Possum sea un deleite para los fans del cine de horror psicológico. Para ver varias veces y descubrir sus múltiples lecturas.