INSIDE OUT #13. Entrevista a Malcolm Danare: “No veía la hora de ser dirigido por John Carpenter.”
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Por Guillermo Martínez.
Corría el año 1982, y el actor Malcolm Danare se encontraba terminando el rodaje de dos películas que marcaron el comienzo de su carrera cinematográfica: The Lords of Discipline, producción por la que fue nominado a un Globo de Oro, y Flashdance, éxito de taquilla absoluto que dejó una huella imborrable dentro de los musicales que se habían visto hasta el momento.
Malcolm desde niño presumió una capacidad de entretenimiento incuestionable y la necesidad de llamar la atención, como él mismo nos cuenta. Por cuestiones del destino, tuvo la oportunidad de aterrizar en los estudios Paramount gracias a su padre, quien recomendó a su hijo a uno de los pasajeros que llevaba en su taxi, sin saber que ese pasajero se convertiría en el primer eslabón de una cadena de acontecimientos laborales sumamente beneficiosos.
De esta manera, el artista oriundo de Los Angeles se enfrentaba a uno de sus primeros grandes desafíos dentro de la industria de Hollywood, con 20 años de edad y un futuro más que prometedor. Ya con un agente a su lado, Malcolm recibió una llamada que cambiaría el rumbo de su carrera notablemente. John Carpenter lo quería dentro del elenco de su nueva película: Christine.
El maestro del terror venía de filmar películas inolvidables como Halloween, The Fog, Escape from New York y The Thing, pero en esta ocasión un detalle no menor marcaría cierta diferencia. Carpenter se propuso adaptar al cine una obra de Stephen King. ¿Qué podría salir mal? Desde mi punto de vista, poco y nada, ya que la película funcionó comercialmente bien en su estreno en pantallas y fue bien recibida por los críticos. Si bien Christine no es una de sus películas más sobresalientes, Carpenter logró construir con ella una serie de secuencias extraordinarias, bajo una ambientación imponente y una banda sonora que enaltece minuto a minuto la narrativa. En pocas palabras, bajo su sello logró, una vez más, trascender a las propuestas de aquel entonces y ofrecernos un entretenimiento más que disfrutable, distinto a los del montón, haciendo de esta adaptación una película como mínimo, inolvidable.
De esto y mucho más hablé con Malcolm Danare, y se los comparto a continuación.
GM: Siempre me gusta comenzar con esta pregunta. Naciste en Los Angeles, en la década del ’60. ¿Podrías contarnos algo acerca de tu infancia?
MD: Tuve una niñez fantástica. Tuve tanto un padre como una madre que me apoyaban emocionalmente de una manera muy amorosa. En cuanto a mí hermana, era genial, genial que estuviese lejos mío (ríe). Vivíamos en una parte del Valle de San Fernando, en Los Angeles, que era muy segura y divertida. Lo que más recuerdo es que lo niños que crecimos en los ’60 y los ’70 teníamos que usar la imaginación y crear nuestras propias cosas, en vez de estar con un smartphone o una computadora.

GM: ¿Cuál fue el primer acercamiento que tuviste hacia el cine o hacia el entretenimiento? ¿Soñabas con ser actor desde niño? ¿Hay algún director o alguna película que te haya motivado o inspirado en aquel entonces?
MD: Nunca tuve realmente la intención de convertirme en actor. Desde chico siempre me gustó mucho llamar la atención y amaba hacer el tonto. Siempre quise toda la atención en mí. Si hablamos de mí película favorita de niño, yo amaba Ben Hur, protagonizada por Charlton Heston. A finales de mí adolescencia, vi una película que me impactó. Era una película de un estudio pequeño llamada Inside Moves, protagonizada por John Savage y dirigida por Richard Donner. Años después, cuando estaba en clase de actuación, siempre elegía hacer escenas de Inside Moves.
GM: Antes de darte a conocer en la pantalla grande. ¿Te formaste como actor de alguna manera? ¿Cuáles fueron tus primeras experiencias antes de estar frente a una cámara?
MD: Yo no tenía idea de que alguna vez me convertiría en actor profesional. Lo único que aprendí sobre actuación en la escuela fue que era bueno memorizando líneas y actuando. El gran problema era el profesor de actuación que teníamos en ese momento, él nunca tuvo la intención de darme una escena o permitirme participar de una obra escolar. Todavía me entristece volver a esos recuerdos. Lo más importante que un profesor en secundaria puede darle a un alumno que está atravesando su adolescencia es confianza y formación. No importa a que se dediquen en la vida, les va a servir. Ese profesor nunca me animó, hizo lo opuesto. Incluso después de haber actuado en tres o cuatro películas, ese profesor seguía diciéndome “ha sido suerte”. Bueno, creo haberle demostrado lo contrario. ¿No?
GM: Teniendo 20 años debutaste en cine con la película “The Lords of Discipline”, interpretando a “Poteete”, papel por el que estuviste nominado a un Globo de Oro. ¿Cómo lograste conseguir el papel? ¿Qué significó en tu vida esa nominación?
MD: Cuando me gradué de la secundaria no tenía idea sobre a qué dedicarme, ni siquiera estaba seguro de qué tipo de clases quería tomar en la universidad, así que comencé a trabajar en una tienda de ropa. Eran finales de noviembre del año ’81, yo tenía 19 años y recuerdo un día a mis padres llamando a la tienda y diciendo “tenés que ir a los estudios Paramount”. Yo les pregunté “¿Qué?”. Mi padre me respondió “acabo de conocer a un caballero que tiene mucho que ver con el mundo del cine, y quiere conocerte”. Lo que es todavía más sorprende es cómo mi padre conoció a este hombre. Mi padre tenía una compañía de taxis en ese momento, y en ese día en particular mi padre estaba manejando uno de sus taxis de regreso al garaje. Mientras iba andando por Sunset Boulevard, mi papá vio a un hombre moviendo la mano hacia él, al costado de la calle. Mi papá notó que su auto se había roto. Sin dudarlo, estacionó para ayudar a ese hombre. El hombre le pidió si podía llevarlo hasta los estudios Paramount. Mi papá le dijo que sí y en el camino ese hombre le contó a qué se dedicaba. Mi padre instantáneamente le dijo “mi hijo es actor”. Cuando el hombre vio una foto mía, le dijo a mí padre “Quiero conocer a Malcolm”. Así que fui a Paramount ese día y conocí a Franc Roddam, el director de mí primera película, The Lords of Discipline. La nominación al Globo de Oro fue la frutilla del postre.

GM: ¿Cómo viviste el estreno de la película? ¿Qué recuerdos tenés del día en que te viste por primera vez en una pantalla de cine?
MD: La premiere de The Lords of Discipline fue increíble. Nunca había ido a la premiere de ninguna película, y menos de una en la que yo fuera coprotagonista. Mi padre y mi madre estaban sentados al lado mío en el teatro. Lo que más recuerdo de ese día fue la escena de mí muerte en la película. Mientras la estábamos mirando, noté que mi mamá cerraba sus ojos. En la recepción, luego del estreno, le pregunté por qué no había mirado esa escena. Ella me dijo “no soy capaz de ver a mí hijo morir, por más que sea fingido”.
GM: Tiempo después fuiste parte de Flashdance, una de las películas más taquilleras de la década y, hoy en día, todo un clásico. ¿Nos podés contar cómo llegaste a la audición?
MD: Tuve mucha suerte. Cuando obtuve el papel en The Lords of Discipline existía el sistema de actores de estudio. Es decir, que si un estudio encontraba un actor que le gustaba, le ofrecerían el trato de las tres imágenes. Eso era el sistema de estudio. The Lords of Discipline y Flashdance eran dos películas de Paramount. Por lo tanto, no tuve que audicionar para Flashdance, fue un papel que me ofrecieron a mí. ¡Ninguno de nosotros imaginaba ni de cerca en lo que esa película se convertiría! Hoy en día ya no existe ese sistema de estudio.

GM: ¿Cómo impactó en tu carrera como actor el haber sido parte de una película tan popular?
MD: Ninguno de los actores en todo el tiempo que estuvimos rodando pensó que Flashdance llegaría a algo. Era la típica película, filmada como un video musical de MTV. Ya estaban Footloose, Dirty Dancing, Fame, etc. En ese momento los estudios estaban buscando lanzar el mejor musical, y Flashdance fue ese hit.
GM: En 1983 fuiste convocado para interpretar a “Moochie” en “Christine”, de John Carpenter, un clásico de culto. ¿Cómo lograste ser parte del elenco? ¿Qué recuerdos tenés del casting?
MD: En 1982 acababa de terminar el rodaje de The Lords of Discipline y Flashdance. En ese momento me estaban enviando muchos guiones para leer. Rechacé Police Academy , porque el día anterior acababa de leer un guion de horror llamado Christine. Me voló la cabeza que John Carpenter dirigiera una película adaptada de Stephen King, llamada con el mismo nombre, “Christine”. El proceso del casting fue normal, te presentabas y conocías al director. Si le gustabas al director, pasabas por otros procesos llamados “mixing and matching”. De entrada supe que le había caído bien a Carpenter. Fue muy divertido en la primera audición. Cuando llegué a casa ese día, mi agente me llamó y me dijo “Carpenter realmente te quiere en la película, quiere que interpretes a Moochie Welch”. ¡Me quedé helado! Días después fui a los estudios y conocí a muchos actores, para los roles de “Buddy Repperton”, “Rich” y “Don”, los 4 chicos malos, también conocidos como la “wrecking crew” en el rodaje. Estoy muy feliz de poder decir que trabajé con Bill Ostrander (Buddy), Steven Tash (Rich) y Stuart Charno (Don).

GM: John Carpenter ya había dirigido películas memorables como “Assault on Precint 13”, “Halloween”, “The Fog”, “Escape from New York” y “The Thing”. ¿Cómo viviste el momento de saber que estarías en su nueva producción? ¿Qué expectativas tenías?
MD: Estaba un poco nervioso, pero no veía la hora de ser dirigido por John Carpenter. Había escuchado que él era más un director técnico que un director de actores. Eso encajaba conmigo. Amaba que él confiaba en sus actores y no se metía a decirles cómo debían actuar, confiaba en que sabía lo que estábamos haciendo.


GM: ¿Podés contarnos algunos detalles de tu primer día de trabajo dentro del set de “Christine’’? ¿Qué recordás de ese día?
MD: El primer día de filmación para mí fue intenso. Fue la escena del taller en donde los chicos malos molestaban a Arnie. Me acuerdo que en el ensayo, Carpenter me dijo exclusivamente que vaya hacia Keith Gordon más allá del típico matón. Y yo hice lo que me dijeron que hiciera. Durante un descanso, vi a Keith Gordon ir hacia Carpenter y decirle algo. Luego Carpenter vino hacia mi y me dijo “A Keith no le gusta lo que estás haciendo, lo está haciendo sentir incómodo”, y yo le dije “¿Qué querés que haga entonces?”, y Carpenter dijo “Hacé lo que estás haciendo, y aún más”.

GM: La escena de tu muerte, luego de que el auto te persigue y te acorrala, me parece una de las más logradas y recordadas de la película. ¿Cómo construyeron esa secuencia? ¿Fue difícil de lograr?
MD: Esta va a ser una respuesta larga. La escena de la muerte de Moochie tomó 1 semana de filmación. Como dije, Carpenter necesita que cada momento sea filmado de la manera en que su ojo quiere verlo, porque esa será la manera en que la audiencia lo verá. Solo dos veces se usó un doble de riesgo durante todo el tiempo que la escena duró. El primer doble fue cuando Christine comienza a seguir a Moochie y él tiene que saltar al medio de la calle. El segundo doble es cuando Moochie salta sobre una reja mientras Christine choca con ella. El resto del tiempo era yo actuando. Toda la corrida por el callejón la hice yo. El coordinador de dobles, Terry Leonard, me aseguró que no había manera de que me atropellara si me resbalaba, me dijo “yo voy a estar manejando tan rápido como vos vayas corriendo”. La otra escena aterradora es cuando Moochie queda atrapado en el estacionamiento. Así es como se filmó: La pared detrás de Moochie era una excavadora que tenía un cable de acero entre mis piernas, unidas con el chasis de Christine en frente mío. Cuando Carpenter gritó “¡acción!” la excavadora que estaba detrás mío tiró de Christine hacia mí. El sonido del metal rompiéndose y la goma quemada fue terrible, pero cuando estás en tus 20 y estás trabajando para John Carpenter, nada de esto realmente importa.


GM: Desde tu vivencia: ¿Cómo describirías el trabajo de John Carpenter en esta oportunidad? ¿Hay algo que recuerdes particularmente de él como director?
MD: Carpenter fue una maravilla. Es un gran director visual. Me considero extremadamente afortunado de haber trabajado con él.

GM: ¿Alguna anécdota graciosa (o no) que puedas compartirnos?
MD: ¡Carpenter es un gran bromista! Una de las mejores bromas que recuerdo haber presenciado se la hizo Carpenter a Richard Kobritz, el productor de Christine. Richard manejaba todos los días al trabajo en su Porsche. Cuando se bajaba, le ponía un cobertor. Ese día Carpenter reemplazó el Porsche con un auto chatarra, pero lo cubrió con el mismo cobertor. Durante el almuerzo, estando todos juntos, Carpenter empezó la broma. Agarró la misma excavadora de la escena con Christine y fingió pasarla por encima del auto de Richard Kobritz, quien casi tiene un ataque al corazón.
GM: También demostraste tus cualidades interpretativas en otros géneros. Integraste el elenco de “National Lampoon’s European Vacation”, “Heaven Help Us” y “Robin Hood: Men in Tights”, entre otras. A diferencia del horror, como género: ¿Qué desafíos se te presentaron como actor dentro de la comedia?
MD: ¡Me ha tocado trabajar con grandes directores de comedia! Mel Brooks, Amy Heckerling, Michael Dinner. El momento más divertido que tuve en un set fue filmando la película Heaven Help Us. El título original era Catholic Boys, para mí el mejor título. Filmamos en las calles de New York y Brooklyn. Trabajar con Kevin Dillon fue increíble, pasamos un gran tiempo juntos. Realmente me encantó interpretar a Anthony Caesar en Heaven Help Us.

GM: En 1987 interpretaste a “Cyrus” en la película “The Curse”, basada en el relato “The Colour Out of Space”, de H. P. Lovecraft, que también tuvo su adaptación en el 2019, protagonizada por Nicolas Cage. ¿Qué nos podés contar acerca de tu trabajo en esta película? ¿Viste la nueva versión dirigida por Richard Stanley?
MD: Esa fue una película interesante de filmar. Los exteriores se filmaron en una pequeña ciudad de Tennessee llamada Tellico Plains. Los interiores de la película se filmaron en Roma, Italia. David Keith dirigió la película. Habíamos trabajado juntos previamente en The Lords of Discipline. Vi la versión de Nicolas Cage y me pareció mejor que la versión en la que yo estuve.

GM: Fuiste actor de voz en producciones como “Godzilla: The series”, “Monster High” y “Ever After High”. ¿Qué particularidades tiene este tipo de trabajo como actor a diferencia de la interpretación en un escenario o frente a cámara?
MD: Ser actor de voz es una maravilla. ¡Llegás al trabajo y te sentás con un micrófono! Me encantó retomar el papel de Mendel Craven. Amé hacer Godzilla. ¡Nunca había estado en una película en la que el presupuesto superara los 100.000.000 de dólares! Eso fue divertido. Hacer Monster High y Ever After High fue increíble también.

GM: Entre el 2004 y el 2006 pudimos verte en “CSI Miami”, interpretando al villano Ned Ostroff. ¿Qué recordás de esta experiencia televisiva?
MD: Siempre es genial interpretar al chico malo. Me encantó interpretar a Ned Ostroff, porque lo hice fuera del estereotipo. Quería que a la audiencia le agradara más allá de ser un chico malo. Recuerdo que un día David Carusso vino y me dijo “realmente estás manejando a este personaje. ¿No?” Y yo le dije “Claro que sí”.
GM: Además de tu talento como actor, no podemos dejar de lado tu rol como escritor y productor. ¿Estás preparando algo nuevo que puedas contarnos?
MD: Descubrí que tenía talento para escribir en el 2008. Escribí una obra de teatro llamada In Heat. Fue aclamada por la crítica y presentada en Los Angeles por 15 semanas. Algunas críticas dijeron “es un mix de Woody Allen y Albert Brooks. Yo la vería todos los días”. Cuando la obra terminó, íbamos a llevarla a New York. Desafortunadamente, eso nunca sucedió debido a problemas financieros.
Hoy en día estoy trabajando en muchos proyectos, escribiendo y produciendo. Si te digo la verdad, tengo mucho más talento produciendo y escribiendo, pero nunca voy a renunciar el estar frente a una cámara. Es más placentero y divertido.

GM: Última pregunta. Se habla de Bryan Fuller como el escritor y director del remake de “Christine”, y Blumhouse a cargo de la producción, quien también está a la cabeza de la nueva versión de “Halloween”, de la secuela de “The Exorcist” y de una nueva versión de “The Thing”. ¿Serías parte de una nueva “Christine”?
MD: Si se llegara a hacer el remake, sería fantástico para Bryan Fuller, me encantaría aunque sea tener un cameo en la película.