Morbius: Una película innecesaria.
2 minutos de lecturaPor Mario Luzuriaga.
Bienvenidxs a una nueva nota de Revista Sincericidio.
Marvel cosecha éxitos cada vez que aparece en cine o en televisión, pero hay una parte que no funciona y viene desde una rama, la cual parece que no va caer muy fácilmente. Sony tiene los derechos de la franquicia del arácnido y sigue usufructuando de la misma, hasta que Disney de una vez por todas se la arrebate.
Mientras tanto, producen películas dentro del universo de Spider-Man, y se despacharon con Morbius.
Michael Morbius (Jared Leto) siempre tuvo una enfermedad incurable que lo tenía tullido, pero no bajó los brazos y se recibió de médico para buscar una cura. En medio de su búsqueda, logró que el ADN de una especie de vampiro sea útil para crear un suero regenerativo contra su enfermedad. Al ser testeado con el mismo, Morbius se convirtió en un vampiro con múltiples habilidades, pero es acechado por la policía debido a una serie de asesinatos en masa, cuyos cadáveres carecían de sangre.
Hasta aquí, es una historia trágica que Marvel supo aprovechar en todos sus cómics y personajes, pero cuando Sony los adapta es cuando empiezan los serios problemas.
El primero de ellos es convertir a estos villanos en antihéroes; lo hizo primero con Venom y ahora lo hace con Morbius. Ambos expuestos a un compuesto raro en el que un adversario también lo usa para causar sus propósitos, y sale vencedor el protagonista de la historia.
El problema es que está muy mal ejecutado el planteo, como así también es forzada la vinculación que quieren hacer con el famoso Multiverso, con la aparición de Michael Keaton como el buitre, tratando de reclutarlo para eliminar a Spider-Man (el agujero de guion más horrible que se haya puesto en una película).
Después dio pie a una secuela por demás de innecesaria, ya que el personaje es cero carismático y Leto parece estar por el sueldo y no le pone voluntad al personaje.
El actor viene de una mala racha con el cine de superhéroes, ya que le fue fatal con su rol de Joker en Suicide Squad, de David Ayer; y ni que hablar del bochornoso epílogo que filmó para la Zack Snyder ́s Justice League.
Es una lástima que armen una franquicia con este personaje, que podría estar compartiendo historias en el MCU de Disney.
Calificación: Mala.