EL HOMBRE GRIS DE ANTHONY Y JOE RUSSO.

Por César Arturo Humberto Heil.

Bienvenidxs a una nueva nota de Revista Sincericidio.

El hombre gris (2022) de Anthony y Joe Russo, producción recientemente estrenada en la plataforma de streaming Netflix es de esos filmes que uno desconfía de entrada a pesar de tener un elenco de nivel y a la dupla de directores de Avengers: Infinity war (2018) Avengers: Endgame (2019) y Captain América: The Winter soldier (2014) y Captain América: Civil war (2016) y la verdad debo decir, que, si bien el filme está plagado de todo tipo de barbaridades de guion, situaciones inverosímiles y personajes estereotipados, las más de dos horas que dura se pasan volando debido a una acción trepidante que no deja tiempo ni para el respiro y  menos para la reflexión cinéfila.

Seis, interpretado por el siempre inmutable y parco Ryan Gosling, es un expresidiario que hace un trato con Fitzroy (Billy Bob Thornton) un miembro de la CIA, para trabajar de sicario del Gobierno. El problema, como en todos estos filmes de agentes encubiertos, es que en algún momento pasan a ser una molestia y deben ser eliminados, en especial cuando no cumplen con lo que se les ordenó.

Es lo que le sucede a Seis, que tiene que cumplir una misión, pero decide cambiar la forma debido a que en la línea de fuego se cruza una menor, desobedeciendo así la orden de su jefe directo Carmichael (Regé -Jean Page).

En la lucha cuerpo a cuerpo Seis apuñala a su objetivo, pero antes de rematarlo descubre que en realidad no es un “bad guy” sino otro agente como él. Herido de muerte le entrega a Seis un medallón que guarda un pendrive con información sobre operaciones encubiertas que involucra y compromete a altos miembros de la CIA. Para recuperar el archivo y eliminar a Seis, Carmichael contrata a Lloyd Hansen (Chris Evans) un despiadado asesino a sueldo quien perseguirá a Seis como Javert lo hizo con Jean Valjean en Los miserables.

Este es el punto de partida para que los hermanos Russo despilfarren millones de dólares en cámaras aéreas injustificadas, kilos y más kilos de explosivos sin sentido, persecuciones por varios países del mundo y balas de todo tipo y calibre.

A pesar de ser una película vacía, inverosímil y demasiado mainstream, El hombre gris entretiene por todo ese coctel de acción sin pausa, la cual como dije al principio, no da respiro y por más que uno sabe que está viendo un gastadero de millones de dólares en un producto intrascendente, no puede soltarla hasta el final.

Está claro que, tanto a Netflix como a los Russo, no les interesa profundizar en los personajes complejos ni enredarse en conflictos profundos, solo tienen puesta la mirada en el puro y llano entretenimiento y eso está perfectamente orquestado por los directores.

En definitiva, El hombre gris es una película para aquellos que quieren pasar un buen rato de acción a toda máquina sin esperar demasiado de las actuaciones y mucho menos de encontrarse una trama inteligente y elegante. Si son de los que les gustan los tiros y los personajes arquetípicos esta es seguramente una buena opción.  

Calificación: Regular