Jeepers Creepers: Reborn

Por Jorge Marchisio.

Bienvenidxs a una nueva nota de Revista Sincericidio.

De alguna forma extraña, Jeepers Creepers se convirtió en una película casi de culto. Apadrinada por el propio Francis Ford Coppola, la primera entrega había sido bien recibida, ya que era una sólida cinta de terror. Pero con el estreno de las secuelas, cada cual peor que la otra, y los crímenes sexuales cometidos por el director Victor Salva; todo parecía indicar que nunca volveríamos a ver al Creeper. Ojalá hubiera pasado eso; pero no.

Esta vez conocemos a una joven pareja, que decide ir a un festival de terror en el lugar donde se dice, el Creeper apareció por última vez. Y en efecto, el Creeper es real, y se prepara para volver tras su descanso de 23 años.

Si, la trama no es muy original; porque si algo se explotó bastante en el terror, es la historia de volver una leyenda urbana real, mientras los protagonistas siguen descreyendo de lo que vieron. De todas formas, esto no tendría nada de malo, si el resto de los apartados hubieran estado bien hechos, pero sigan leyendo, porque pocas cosas vamos a destacar de este proyecto.

Lo primero que salta a la vista es el bajo presupuesto con el que se contaba. Uno pensaría que, al ser un remake de una franquicia establecida en el género, se les iba a dar algo más de efectivo para al menos, poder hacer las escenas de muerte, lo más realistas o espeluznantes posibles; pero no. A cada momento se nota la pantalla verde, viéndose todo muy falso; y, por ende, ridículo y poco creíble. Dudamos muchos que alguna persona que tenga más de doce años, se logre asustar con Jeepers Creepers: Reborn.

Y esa escasez de recursos también se nota en los actores. Sabemos que, en la mayoría de los slashers, los protagonistas no suelen ser personas que vemos en proyectos con nominaciones a las actuaciones; pero acá de verdad que no se salva nadie. Y esto lo decimos en especial por la pareja principal, que solo sabe gritar como único recurso para demostrar que tiene miedo de lo que está pasando. Insoportables es poco.

En conclusión, Jeepers Creepers: Reborn es una pésima película, y debería estar en las listas de lo peor del año. Con casi nada destacable, es una muestra más de que algunas sagas no merecen remakes, o si se los hace, que sea con los recursos necesarios para poder hacer algo digno. Si no, ahórrenselos.