Revista de Cine: Revista Sincericidio

Revista de cine, y entretenimiento. – Noticias de cine, entrevistas del mundo del cine y VOD, festivales de Cine, estrenos.

No atiendas esa llamada

4 minutos de lectura

Llamada maldita

Bienvenidxs a una nueva nota de Revista Sincericidio. Los documentales realizados por los directores norteamericanos, en especial aquellos de los denominados True Crime, es decir, basados en casos criminales reales, no suelen ser de mi agrado. La forma en que encaran los temas es casi siempre igual, usando un mismo patrón narrativo. Algo así como esas series de ficción procedimentales, donde la fórmula se repite una y otra vez, capítulo tras capítulo, y solo lo que cambia es la historia central. Hoy veremos de qué trata No atiendas esa llamada.

Por César Arturo Humberto Heil

La estructura de estos documentales casi siempre está cimentada en las entrevistas a los protagonistas e imágenes de archivo. A partir de allí se reconstruye el hilo narrativo del filme o miniserie, atendiendo solamente a los hechos. Algo muy básico, directo y sin interacciones por parte de los creativos que puedan inferir algún vuelo poético o una interpretación subjetiva del espectador, lo que termina siendo un poco aburrido. The facts are the facts, suelen esgrimir quienes abordan este tipo de temáticas, lo que es muy cierto en algún sentido.

Cuando me decidí a ver la miniserie documental de 3 capítulos No atiendas esa llamada (2022), lo hice con muy pocas expectativas. Pensaba que me iba a aburrir y que iba a ver más de lo mismo, pero debo decir que me atrapó de entrada. ¿Qué pasó entonces?

Una voz en el teléfono

Básicamente, me envolvió la historia real, cuya trama es tan extraña, macabra y siniestra que no agarré el control remoto hasta que terminé el último capítulo. Me la devoré de un tirón.

La miniserie se basa en un hecho sucedido durante un periodo de 10 años, que va desde la década del ’90 hasta mediados del nuevo milenio y que ocurrió en distintos pueblos y pequeñas comunidades a lo largo de varios Estados de Norteamérica.

La historia de No atiendas esa llamada cuenta cómo, lo que en apariencia parecía ser una broma de mal gusto llevada al extremo, terminó convirtiéndose en un grave delito de orden sexual, en donde no solo está involucrado el perpetrador fantasma, sino también muchos de los que cayeron en el engaño.

Un desconocido llamaba por teléfono a restaurantes de comidas rápidas fingiendo ser un oficial de la policía, diciendo que una empleada infiel le había robado dinero a un cliente. Con esa excusa obligaba a los encargados a cometer abusos de todo tipo contra sus jóvenes empleadas. Las violentas exigencias de este psicópata iban desde hacer desnudar a las chicas, hasta exigirles que cometan algún tipo de abuso sexual o físico contra ellas. Realmente aberrante.

La trama también se centra en la tozudez de un oficial de policía, que luego de ver los videos de las cámaras de seguridad de un McDonald’s, decide ir en busca del criminal, tarea que no le va a resultar nada fácil, ya que los crímenes se vienen sucediendo desde hace años y en distintas localidades a lo largo del país. Lo que no sabe es que, en otro Estado a varios kilómetros de distancia, hay otro oficial con sus mismas intenciones.

Debo reconocer que la miniserie dirigida por Sara Mast, a pesar de mantener una estructura similar a los documentales con temática criminal, se las ingenia para sobresalir del resto. Un poco por su estructura temporalmente desordenada, en donde saltamos de un pueblo a otro en distintos años y conocemos las historias de los personajes involucrados, y otro por la potencia de la historia y la obsesión de los dos policías que no pararán hasta llegar a encontrar al culpable.

Obediencia debida

La docuserie es, además, una mirada inteligente sobre el comportamiento de los seres humanos ante la autoridad y nos retrotrae al famoso experimento del psicólogo Stanley Milgram, quien en la década de 1960 realizó su “Estudio comportamental de la obediencia”, en donde una serie de voluntarios les daban golpes de corriente eléctrica (ficticia) a personas, que en realidad eran actores, cada vez que respondían mal una pregunta. La mayoría de los participantes seguían adelante con las descargas, a pesar de saber que podían causarles graves daños o incluso la muerte. Solo muy pocos voluntarios desistieron de seguir aumentando la intensidad de la corriente.

Conclusión

No atiendas esa llamada es una serie documental muy interesante de ver, no solo por la historia, que ya de por sí es muy atractiva por sus características tan particulares, sino porque termina siendo una interesante reflexión sobre la obediencia a la autoridad y cuáles son los límites que una persona le debe tener a ella. Muy recomendable.

Un dato: El director Craig Zobel, responsable de filmes como The Hunt (2020) y Z for Zachariah (2015) realizó Compliance (2012), una ficción que toma este hecho real.

Disponible en Netflix

Calificación: Excelente

Más historias

Puede que te hayas perdido