La Invitación: Vampirismo y feminismo
3 minutos de lecturaBienvenidxs a una nueva nota de Revista Sincericidio. Hace unos días vi la película de terror La Invitación (2022), de la directora Jessica M. Thompson. Es el segundo largometraje después de su aceptable debut con The Light of the Moon (2017), y la verdad es que me encontré con un filme que termina siendo más de lo mismo y que resulta poco novedoso en lo que a cintas de vampiros se refiere.
Por César Arturo Humberto Heil
Evie (Nathalie Emmanuel) es una joven que un día decide buscar en internet sus lazos familiares. Esto la lleva a que sea contactada por Oliver (Hugh Skinner), un supuesto primo, quien le dice que debe conocer a su familia olvidada y la invita a pasar un fin de semana en un lujoso castillo de Inglaterra y de paso asistir a una boda.
Luego de reiteradas insistencias por parte de Oliver, Evie termina aceptando la propuesta. Lo que no sabe es que esa invitación es mucho más oscura, siniestra y tiene que ver con sus antepasados y con un legado que debe ser continuado.
El filme arranca como una típica película sobre la nobleza y las familias poderosas del Reino Unido. Va construyendo el relato alrededor de Evie y su relación con De Ville (Thomas Doherty), dueño de la mansión. De Ville es un enigmático y seductor personaje con quien desde un principio se siente sumamente atraída por su generosidad y sus buenos modales.
Con el paso de los minutos, el enorme castillo medieval en donde no faltan mayordomos, empleadas domésticas, sabrosos platos de comida, botellas de vinos añejos, costosas colecciones de arte, amplias habitaciones, interminables escaleras y pasillos oscuros, va dejando entrever que algo sucede en ese lugar y que una presencia no humana y malvada está sedienta de sangre.
Lo mejor de La Invitación está en esos primeros 40 minutos. Allí, las incautas empleadas domésticas que son el alimento para el ser que mora en ese castillo, van cayendo como moscas atrapadas en la red de una araña y en donde una variopinta fauna de personajes extravagantes, van tejiendo sobre Evie su inexorable destino, aunque hacia el final tenga una vuelta de tuerca impensada.
Todo el resto, hasta el minuto final, es burdo, menos original y poco creativo. Ese interesante glamour de la nobleza del principio, se ve despilfarrado por las típicas escenas de vampiros, la sangre, las tomas explícitas y las grotescas trasformaciones. Esto hace que La Invitación se vea como un producto menor y con escasa imaginación.
En cuanto a la vuelta de tuerca del final, no voy a adelantar mucho, pero se enmarca en esta idea de empoderamiento femenino, en donde las mujeres pueden hacerle frente a cualquier familia cuya base estructural esté sustentada en el modelo patriarcal.
Conclusión
La Invitación es un filme discreto. No tiene mucho que aportar al género y solo va a funcionar en aquellos que disfruten de las películas de vampiros y no les importe que sea un producto genérico más.
Disponible en HBO Max
Calificación: Regular