Boksoon debe morir: Vestida para matar

Bienvenidxs a una nueva nota de Revista Sincericidio. Hace ya unos cuantos años que el cine surcoreano está generando excelentes producciones. Cada vez son más los directores que se animan a contar sus historias seducidos por una industria en constante crecimiento y con proyección internacional. Las temáticas abordadas son variadas, siendo el terror y la acción las más elegidas. En lo que respecta al cine de acción, la mayoría son películas cargadas de escenas fuertes y mucha violencia gráfica.

Por César Arturo Humberto Heil

Es el caso de Boksoon debe morir (2023), del director Sung-hyun Byun y de reciente estreno en Netflix, plataforma que se ha convertido en una gran difusora de los contenidos surcoreanos. Después de verla estoy en condiciones de asegurar que el filme se convertirá en uno de los platos fuertes de la compañía.

La trama gira en torno a Gil Bok – soon (Jeon Do-yeon) una madre soltera y su hija adolescente Gil Jae Yeong (Si-ah Kim). Bok -soon tiene una particularidad, trabaja como asesina a sueldo para la compañía MK, liderada por Cha Min Kyu (Sol Kyung-gu) y su hermana Cha Min Hee (Esom).

Bok – soon es considerada una asesina de clase A, infalible e implacable y es casi una leyenda para las nuevas generaciones de sicarios que se entrenan en las dependencias de MK.

Pero cuando tiene que cumplir una nueva misión con la pasante Kim Yeong-ji (Lee Yeon) y asesinar al joven hijo de un político, la situación dará un giro que pondrá la vida de ella y de su hija en peligro.

Severa asesina, madre indulgente

Gil Bok – soon puede asesinar a sangre fría y sin ningún tipo de remordimiento a quien se le cruce. Pero cuando se trata de atender las necesidades de su hija adolescente, no puede hacer frente a los problemas que se le presentan, en especial a sus preferencias sexuales, las cuales no incluyen a los hombres.

Este es uno de los aspectos más interesantes de Boksoon debe morir. Plantea la dualidad de una mujer fría y calculadora a la hora de hacer su trabajo, e irresoluta y débil ante las inseguridades planteadas por su hija respecto a sus relaciones amorosas y sexuales.

Toda esta interesante subtrama es abordada con situaciones intimistas de muy buena resolución. Estas rompen la tensión generada por los momentos violentos y le dan al relato un perfecto equilibrio entre lo doméstico y lo “laboral”.

También son de destacar los diálogos entre madre e hija, los cuales abordan temáticas adolescentes como la definición de la identidad sexual, el primer amor y el bullying escolar.

A partir de un hecho acontecido en la escuela, en donde su hija intenta matar a un compañero que la acosa mediante unas fotografías de ella besándose con una compañera, su madre empieza a preocuparse por ese comportamiento agresivo, temiendo que haya heredado de ella ese lado oscuro y violento.

Katanas, balas y mucha acción

Las escenas de acción son un verdadero deleite. El director Sung-hyun Byun coreografía las peleas y las muertes con una destreza artística envidiable.

Con hermosas tomas en ralentí, movimientos de cámara sincronizados, chorros de sangre que fluyen como un géiser y katanas que vuelan cortando el aire y la carne, el director construye una narrativa visualmente atractiva. En este sentido, es fantástica una de las escenas finales en donde Gil Bok- soon se enfrenta a Cha Min Kyu y se imagina todos los escenarios posibles durante la pelea. Brillante.

Conclusión

Boksoon debe morir es un filme surcoreano de calidad. La película está cargada de un lirismo fílmico que, si bien presenta una historia algo ya vista, sobresale por algunas genialidades del guion como es la relación entre madre e hija, por las actuaciones de Jeon Do-yeon, Sol Kyung-gu y Si-ah Kim, quienes están fantásticos en sus roles y por la dirección de Sung-hyun Byun.

Si les gustan las películas de acción, esta es sin duda una que no deben dejar de ver. Estoy seguro de que van a salir más que satisfechos.

Disponible: Netflix

Calificación: Muy buena