La primera profecía: El engendro del diablo
4 minutos de lecturaBienvenidxs a una nueva nota de Revista Sincericidio. La primera profecía, se trata de una película estadounidense de terror sobrenatural dirigida por Arkasha Stevenson, quien colaboró en la escritura del guion junto a Tim Smith y Keith Thomas, basándose en una historia concebida por Ben Jacoby. Esta obra se presenta como una precuela de la icónica película “The Omen” (1976), formando así la sexta entrega de la franquicia.
La fotografía estuvo a cargo de Aaron Morton, la edición de Bob Murawski y Amy E. Duddleston, la música de Marcos Korven. La toma principal de fotografías se realizó en Roma, así como en los estudios de sonido de Lumina Studios. Fue durante un período que abarcó desde el 19 de septiembre hasta el 22 de noviembre de 2022.
Esta protagonizada por Nell Tiger Free (Margaret Daino), Sônia Braga (Sor Silvia), Ralph Ineson (padre Brennan), Bill Nighy (cardenal Lawrence), Tawfeek Barhom (padre Gabriel), María Caballero (Luz Vález), Nicole Sorace (Carlita Skianna), Charles Dance (padre Harris).
Sinopsis
Cuando una joven estadounidense es destinada a Roma para consagrarse al servicio eclesiástico, se ve enfrentada a una oscuridad que cuestiona su fe. La cual destapa una aterradora conspiración que busca desencadenar el nacimiento de la personificación del mal.
La primera profecía destaca notablemente entre los frutos de esta cosecha. Sobresalen algunos contendientes auténticos, entre los que se encuentra una escena de nacimiento que posiblemente sea la más explícita que se haya visto en un lanzamiento comercial. Esta escena, magistralmente presentada y enmarcada por el director Stevenson, despierta la curiosidad por el verdadero horror que acecha en su interior. Hay una intriga que podría revelarse demasiado tarde para algunos.
La película se adentra en escenas de muerte sorprendentemente espeluznantes, entre las que se destaca un suicidio que añade una capa de intensidad similar a un momento memorable de la película original. Así como un caótico accidente vehicular de una brutalidad especialmente impactante.
Puros sustos efectivos
Sin embargo, el mayor punto fuerte del filme radica en su habilidad para generar sustos efectivos, desde los sobresaltos provocados por una siniestra figura detrás de una cortina ondeando al viento. También hasta el terror que inspira un fantasma emergiendo de la oscuridad absoluta. Estos momentos están magistralmente ejecutados, situándolos en la cima del género del terror.
Nell Tiger Free, conocida por su papel en “Servant”, emerge como una fuerza imparable en el papel principal. Va liderando la película con una presencia magnética en pantalla. El guion demanda mucho de ella, ya que su personaje transita desde la ingenuidad inocente hasta la audacia seductora, y desde la amabilidad compasiva hasta la posesión demoníaca maternal. Sin embargo, nunca dejamos de estar completamente inmersos en su viaje gracias a su interpretación magistral y envolvente.
Ineson, Dance y Nighy aportan una credibilidad inusual a La primera profecía, elevándola por encima del típico filme de terror. Braga, en particular, irradia amenaza en su papel como la hermana principal, cuyas intenciones oscuras son evidentes. Incluso los personajes secundarios destacan con su estilo único; María Caballero, interpretando a la hermana que toma sus votos junto a Margaret, logra un equilibrio fascinante entre lo católico y lo sensual. Una escena memorable la muestra colocándose la cofia y el velo con una sugerente elegancia, casi evocando el aura del bondage.
Evocando a Dario Argento
Con respeto a el diseño de producción de primer nivel logra recrear de manera excepcional la atmósfera de la Roma de 1971. Mientras que el talento del director de fotografía, Aaron Morton, capta de manera magistral la esencia de la ciudad en cada escena. Destaca especialmente el manejo brillante de la iluminación y la oscuridad, evidente en momentos como el hipnótico viaje nocturno al estilo de Dario Argento en un club.
Como en numerosas tomas que son tanto memorables como profundamente evocadoras. Entre estas, se destaca una en particular, la imagen de Margaret recostada en la cama una noche. Ahí su cabello desplegado sobre la almohada mientras el rímel traza caminos por sus mejillas, constituye un retrato visualmente impactante y cargado de significado temático.
Conclusión
La primera profecia se sumerge profundamente en la temática de cultos que rinden culto al diablo y en intrigas siniestras. Se trata con profunda solemnidad, no solo en las representaciones, sino también en la fotografía, la música y las expresiones que se reflejan en los rostros de las personas. Aunque las referencias más refinadas solo se sugieren, aquellos dispuestos a aceptar esta premisa encontrarán una gran cantidad de elementos que les cautivarán.
Disponible: Cines
Calificación: Muy buena