Run.
4 minutos de lecturaPor Daniel López Pacha.
Run (Corre, en Latinoamérica) es un film estadounidense de suspenso y misterio de 2020.
Dirección: Aneesh Chaganty.
Guion: Aneesh Chaganty y Sev Ohanian.
Producción: Sev Ohanian, Natalie Qasabian.
Música: Torin Borrowdale.
Fotografía: Hillary Spera.
La fotografía principal se inició en Winnipeg, Canadá el 31 de octubre de 2018 y finalizó el 18 de diciembre de 2018. Con Sarah Paulson (Ratched) como Diane Sherman, Kiera Allen como Chloe Sherman, Onalee Ames como Crying Hands, Pat Healy como Ted Sherman, Sara Sohn como Kammy.
Diane da a luz prematuramente a su hija, Chloe, quien es trasladada de inmediato para recibir tratamiento de emergencia.
Pasados diecisiete años, Chloe tiene una enfermedad crónica, y está en silla de ruedas obligada a tomar muchos medicamentos. Diane, madre soltera y posesiva, educa a su hija en su casa del campo. Chloe se prepara arduamente para cuando tenga que ir a la universidad. En su casa, espera ansiosa saber si ha sido aceptada en la Universidad de Washington. Diane, quien controla el correo de Chloe, le comenta que le informará inmediatamente si llega una carta.
En medio de las compras que Diane acaba de traer, Chloe descubre un frasco de pastillas verdes que le recetaron a Diane. Ese mismo día, a la noche, Diane le da a Chloe sus medicamentos nocturnos, con la píldora verde nueva entre ellos. Luego, Chloe, ve una botella con el nombre de “Chloe” y etiquetada como “Trigoxina”. Ella le quita la etiqueta, descubriendo que era una etiqueta falsa. En la original dice “Diane”.
Chloe intenta buscar el nombre del medicamento en la computadora, pero descubre que la internet está desconectada.
Chloe convence a Diane para que la lleve al cine y en un descuido se cuela a la farmacia cercana. Chloe convence al farmacéutico para que busque las recetas de Diane y descubre ahí que la píldora verde es un relajante muscular para perros, que podría causar parálisis si la ingiere un humano. Diane la encuentra y le inyecta un sedante para llevarla a la casa.
Chloe, molesta, se despierta y encuentra que está encerrada en su dormitorio. Escapándose por una ventana, se arrastra por el techo hasta la habitación de Diane. En un momento, sufre un ataque de asma y se arrastra a su habitación para recuperar su inhalador. Chloe intenta bajar las escaleras usando un salva escaleras, pero encuentra que los cables fueron cortados. Al empujar su silla de ruedas por las escaleras, cae accidentalmente. Herida, comienza a darse cuenta de que puede mover los dedos de los pies, lo que le resulta extraño.
Ella huye de la casa y casi es atropellada por un camión de correo. En ese momento, le explica al cartero la situación. Luego ve que su madre se acerca conduciendo por la calle. Diane se detiene y le pide al cartero que la deje llevar a su hija a casa, pero el cartero quiere llevarla al hospital. En un descuido, Diane le inyecta un sedante por detrás al cartero.
Chloe despierta nuevamente encarcelada, pero ahora esta encadenada a la pared del sótano en su silla de ruedas. En un momento, descubre una carta de aceptación de la Universidad de Washington en la basura, la que Diane le había ocultado. Luego, encuentra una caja de recuerdos, artículos y documentos que revelan a Chloe cuando era niña usando sus piernas.
Más tarde, Chloe se despierta paralizada en una cama de hospital. Antes de que pueda darle un mensaje a la enfermera, una alarma de código azul la llama. Diane se cuela y secuestra a Chloe. Al regresar, la enfermera encuentra una nota que dice “Mamá”. Diane se detiene justo antes de la salida, porque le resulta imposible descender el gran tramo de escaleras con Chloe. Los guardias las alcanzan y Diane amenaza con disparar.
Siete años después, Chloe visita a Diane que está enferma.
En una entrevista para collider.com, Sarah Paulson habló sobre las razones que la empujan a escoger esta clase de roles:
“Las cosas no siempre son lo que parecen (…) En realidad, todo es una especie de baile al filo de la navaja. Hasta que lo vean, no sabrán a que me estoy refiriendo, pero encajar todo será un desafío (…) Realmente no había sido la protagonista de una película, una película de estudio de verdad (…) Mi vida televisiva es diferente, y también hay una parte de mí que quiere demostrar que yo también puedo hacer eso”, indicó.
Curiosidad: La actriz debutante, Kiera Allen, sufrió un accidente que la obligó a utilizar una silla de ruedas desde los 17 años. Por suerte, Allen contó con todo el apoyo de su familia, amigos y compañeros, y no abandonó la actuación, logrando un lugar en la Columbia University.
En síntesis. Es una película excelente, brutal, con buenas actuaciones y un buen clímax. La verdad, no decepciona.