The Shrink Next Door.
2 minutos de lecturaPor Jorge Marchisio.
Series que tratan sobre la psicología, tenemos de a montones. Pero si les decimos que, en vez de un drama hecho y derecho, The Shrink Next Door nos presenta una tragicomedia entre un hombre hiper inseguro de sí mismo, y su psicólogo poco ético, la cosa seguro cambia. Y más aún si la protagonizan Will Ferrell y Paul Rudd. Pasen y vean de qué trata este proyecto tan poco comentando actualmente.
La trama sigue a Marty Markowitz, un hombre soltero de mediana edad y que toda su vida sufrió de una grave inseguridad. Un día, y por recomendación de su hermana, asiste a terapia con el Dr. Ike, quien pasa rápidamente a convertirse en su mejor amigo. Y de la noche a la mañana, entablan una amistad que va a durar décadas.
La serie producida por Apple TV llega por lo bajito, con una propuesta bastante pequeña, que se centra más que nada en la buena construcción de personajes y el buen quehacer de sus actores principales.
Como ya mencionamos, The Shrink Next Door está protagonizada por Paul Rudd y Will Ferrell. Sabemos que el primero de ellos es bastante querido por la comunidad cinéfila; pero acá hace de nuestro antagonista; un psicólogo manipulador que, al ver la debilidad de sus pacientes, los usa para placer y beneficio propio, mientras los va alejando de sus seres queridos, y por ende, potenciales riesgos para sus planes maquiavélicos.
Mientras que Will Ferrell, por alguna razón divide bastante las aguas, siendo querido por varios (quien les habla), y odiado por tantos otros. Si son de este segundo grupo, les decimos que esta vez Ferrell no hace de ese personaje insoportable que se la pasa gritando incoherencias con voz chillona, no. De hecho, su papel recuerda bastante a esa persona triste y gris que pudimos ver en la infravalorada película llamada Más Extraño que la Ficción.
El humor que se maneja recuerda bastante al mejor Woody Allen. Solo a base de diálogos y situaciones surrealistas (que se viven recalcando como si hubieran sido verdaderas), la serie se encarga de que todos los que hacen terapia, miren con un poco de desconfianza a sus psicólogos; pero sin llegar al punto de demonizar a la profesión, o de tratarlos como chantas; que era el lugar obvio para caer.
En conclusión, The Shrink Next Door es una buena serie. Si bien es una frase molesta de decir o escuchar, lo vamos a hacer, “no es para todo el mundo”, en especial por el estilo de humor que maneja, o por la presencia de uno de sus protagonistas. Pero si esto no les molesta, merece que le den una oportunidad.