Fanático: Fabricando a un impostor.
2 minutos de lecturaPor Mario Luzuriaga.
Bienvenidxs a una nueva nota de Revista Sincericidio.
El lado oscuro del negocio de la música y de estos nuevos artistas de trap son la trama principal de “Fanático”, la nueva mini serie de Netflix protagonizada por Lorenzo “Toto” Ferro. Sin dudas una gran opción para descubrirla.
Cuenta la historia de “Quimera”, el mayor ídolo musical de España, que muere delante de sus fans durante un concierto. Lázaro, un fan incondicional, ve la oportunidad de escapar de su monótona y precaria vida y, de la noche a la mañana, se convierte en lo que admira desde hace mucho tiempo: su propio ídolo.
La serie arranca desde el inicio con su premisa. Un cantante de trap que se excede con todos los vicios que le presenta esta “vida loca”, se desploma mientras da su concierto. Es ahí que parece desplomarse el castillo de naipes que construyó su entorno, principalmente de su mánager, su mejor amigo y su novia. Pero la llegada de Lázaro hace que todo cambie de un día para el otro.
Toto Ferro encarna a este joven argentino que se gana la vida como Delivery junto a su novia Clara, refleja la realidad que se vive también en España. De la situación que viven los inmigrantes y de cómo se ganan la vida dignamente para poder subsistir. Pero esta nueva juventud tiene la ambición de trascender y lo hacen a través de las redes sociales, las mismas juegan un rol fundamental en esta historia.
Por su gran parecido físico con “Quimera”, Lázaro inicia un juego para alcanzar una fama que tiene como objetivo poder seguir alimentando el “legado” de este artista y poder sacar un pequeño rédito.
Ahí entra a jugar la perversidad de su mánager y la compañía discográfica que quieren sacar un provecho máximo, con el cadáver aún tibio del pobre artista que fue víctima de los excesos de la fama y el hostigamiento de estas compañías.
Sin dudas es una de las mejores producciones tapadas que presentó Netflix, con sólidas actuaciones, sobre todo la de Ferro, que también hace una fuerte crítica a los tiempos que se viven en el negocio de la música.
Calificación: Muy buena.
Disponible en Netflix.