Las tías: Las tías están enojadas
3 minutos de lecturaBienvenidxs a una nueva nota de Revista Sincericidio. El cine de terror mejicano viene creciendo y con muy buenas producciones. Huesera de Michelle Garza Cervera, Desaparecer por completo de Luis Javier Henaine, Mal de ojo de Isaac Ezban y Atroz de Lex Ortega son algunos de los filmes de terror producidos en el país Azteca que más se destacan. Las tías (2024) del director Felipe Martínez Amado, es un filme que va en esa sintonía, pero que no llega a estar a la altura de los mencionados por varias razones que intentaré exponer.
Por César Arturo Humberto Heil
Autismo y una casa embrujada
Mariana (Ximena Sariñana) es una madre recién divorciada que se muda junto a su hija Lola (Camila Núñez) a una vieja casa propiedad de unas tías fallecidas en extrañas y violentas circunstancias. Lola es una niña con un desorden del espectro autista que no habla desde hace años. La decisión de mudarse a esa casa obedece a mejorar la salud de su hija y potenciar el tratamiento alternativo con el que Mariana la está tratando. Este tratamiento está indicado por Manuel (Roberto Quijano) un terapeuta que también ha tratado a las tías de Mariana.
Al principio la condición de Lola no presenta cambios. Sigue sin hablar y prácticamente ajena a su entorno. Las cosas dan un giro inesperado cuando Lola habla por primera vez y menciona a las tías. Para su madre el hecho de que su hija hable es prácticamente un milagro y en la vorágine de tal acontecimiento no le da mucha importancia al tema. Pero cuando Lola comienza a entablar una conversación con las difuntas hermanas y a tener breves episodios de sonambulismo su madre comienza a preocuparse.
Mas drama que terror
Las tías se centra más en el drama de Mariana por atender y curar a su hija y en su relación con su ex marido Ernesto (Diego Klein) que en la cuestión paranormal y terrorífica. A lo largo del filme hay más escenas de discusiones con Ernesto que de los fantasmas de las tías. Esta elección por parte de los guionistas Leonel D’Agostino, Andrea Gobera Fajer y Martín Florio da como resultado que la película entre en un terreno de indefinición y uno no sepa bien que es lo que realmente se quiso contar.
Respecto a las escenas sobrenaturales, las mismas son a cuentagotas y cuando aparecen no generan ni sobresaltos ni miedo. Esta vaguedad de género hace que todo se sienta anodino y sin sorpresas. Si uno analiza la carrera de Martínez Amador se dará cuenta que su fuerte viene siendo la comedia romántica. Las tías sería su primera incursión en el género de terror y eso se nota a la hora de marcar el pulso al relato.
Conclusión
Con una vuelta de tuerca algo previsible hacia el final y cierta inverosimilitud en las acciones de Mariana, Las tías termina siendo un producto intrascendente y fallido. Tiene también muy poco para aportar al género y con algunas actuaciones bastante flojas que terminan por redondear un filme realmente innecesario.
Disponible: Prime Video